
La economía argentina sigue mostrando un escenario complejo para las grandes corporaciones extranjeras. En los últimos meses, según un informe de Ámbito Financiero, varias multinacionales confirmaron la venta o retiro de sus operaciones locales, afectando sectores como consumo masivo, salud, medios, automotriz y retail. El fenómeno se aceleró durante la gestión de Javier Milei, en un contexto de caída del consumo, altos costos operativos e incertidumbre.
Entre los movimientos recientes, Burger King puso en venta su operación en Argentina, Swiss Medical adquirió el control total de Diagnóstico Maipú, Paramount anunció la venta de Telefé y Carrefour evalúa ofertas por más de 600 locales. Otras compañías, como InterCement y Magnera, cerraron o redujeron operaciones.
Tendencia en alza
La tendencia se extiende a múltiples sectores: Nissan dejó de fabricar localmente, Clorox y P&G vendieron sus operaciones a grupos argentinos, Xerox y Internexa transfirieron negocios de tecnología, y Prudential Financial cedió su operación de seguros. En energía, TotalEnergies y Raízen ajustaron sus activos estratégicos.
El fenómeno se aceleró durante la gestión de Javier Milei, en un contexto de caída del consumo, altos costos operativos e incertidumbre.
Aunque muchas operaciones mantienen marcas y empleos, el fenómeno evidencia una “argentinización” de activos: las multinacionales reducen exposición y grupos locales como Newsan, Swiss Medical y Galicia aprovechan oportunidades para expandirse.
El proceso refleja un doble efecto: pérdida de atractivo para la inversión extranjera y consolidación de actores locales. La combinación de caída del consumo interno, volatilidad cambiaria y marco regulatorio incierto sugiere que el repliegue de corporaciones globales probablemente continúe, impactando en la estructura productiva y de servicios del país a mediano plazo.








