El camino de ripio, angosto y con pendientes pronunciadas que une varias localidades de Punilla, comienza a transformarse en un acceso más seguro y moderno. Con un proyecto que no solo apunta a la pavimentación, sino también a la readecuación de la geometría de la ruta, la Provincia de Córdoba sigue avanzando en la mejora de la infraestructura vial que es clave para la conectividad de la región.
En un acto licitatorio presidido por Martín Gutiérrez, director de Vialidad Provincial, junto a los legisladores del departamento Punilla, Walter Gispert, y de Pocho, Jorge Heredia, además de la jefa comunal de Tala Cañada, Paola Martínez, se abrió la convocatoria para la ejecución de un nuevo tramo de la Ruta Provincial 28. Este nuevo avance se suma a los trabajos que ya se están llevando a cabo en otros tramos, y tiene como objetivo dotar de mayor seguridad a una vía que, hasta el momento, representaba un desafío para los conductores por su mal estado y la peligrosidad que implicaban sus características.
Tres empresas presentaron sus ofertas para este tramo de pavimentación: AFEMA S.A., José J. Chediak S.A.I.C. y Pablo Federico e Hijos S.A., lo que asegura una competencia sana que podría acelerar el proceso y mejorar las condiciones de ejecución de la obra. El proyecto busca mejorar las condiciones de un tramo que hasta el momento presenta dificultades evidentes tanto para los vehículos como para los vecinos que dependen de esta ruta para su día a día.
Avance de obra
Por otro lado, el avance en los dos tramos actualmente en ejecución es considerable. El primer tramo, que va de Tanti hasta el acceso al Cerro Blanco, abarca 9,34 kilómetros y ya registra un avance del 45%. Este sector urbano y rural tendrá una calzada pavimentada de 8 metros de ancho en la zona urbana, y de 6,70 metros en la zona rural, además de contar con banquinas y un sistema de drenaje adecuado. El cruce del arroyo El Durazno, uno de los puntos más críticos, ha requerido obras hidráulicas especiales para garantizar la circulación segura en tiempos de lluvia y evitar inundaciones.
El segundo tramo, que conecta Tala Cañada con Taninga, está aún más avanzado, con un 83% de progreso. Este sector de 13,2 kilómetros de longitud presenta también una importante obra en zonas urbanas y rurales, con una carpeta de concreto asfáltico y un diseño que contempla todas las especificaciones para mejorar la seguridad vial.
Sin duda, la pavimentación de la Ruta Provincial 28 no es solo una obra de infraestructura, sino también un símbolo del compromiso del Gobierno provincial con el desarrollo de la región y la mejora de la calidad de vida de quienes transitan por estas rutas. Con la ejecución de estos trabajos, Punilla y localidades aledañas se acercan a una conectividad más moderna y segura, un paso fundamental para el progreso de la región.
